Resumen
Este es un email práctico y muy sencillo, centrado en ayudarte a gestionar los cambios de los que te vengo hablando, y especialmente pensado para personas que no tienen una suscripción de pago de este boletín. Para trabajar esa adaptación puedes utilizar cualquier técnica que conozcas, y que creas puede servirte. Nosotros aquí utilizamos a la imaginación como la base para ese trabajo.
Para empezar, deberás tener claro que las cosas de las que te hablo, como códigos e información energética, no anuncian sus llegadas por los telediarios. Esa es la razón por la que te paso las fechas, que son las únicas referencias que tienes de ello. Insisto, para explicarme bien, que a la hora de gestionar los cambios que traen cosas tan intangibles como “códigos e información energética”, solo tienes las fechas de referencia que te he explicado en los emails #110 y #125.
También quiero insistir en que, si lees este boletín porque tienes una suscripción en su versión gratuita, lo que vamos a utilizar es una opción de trabajo que hemos ido desarrollando poco a poco, y que llamamos “Tu Mundo Personal”.
Pero, y para que no haya lugar a ninguna duda, si tienes una suscripción de pago puedes utilizar la técnica “Conecta”, en lugar de la que te explico aquí, porque cualquiera de las dos te valdrá para hacer tu trabajo.
Tu Mundo Personal (TMP)
Si tienes más de un año de suscripción a este boletín, habrás leído ya sobre Tu Mundo Personal. Si no tienes idea de lo que hablo, no importa, tendrás que revisar de todos modos lo ya escrito, para que entiendas al completo el potencial de lo que viene a continuación. Así que sepas o no sepas, o te acuerdes o no, comenzaremos por repasar lo que ya hemos dicho sobre el tema.
Tu Mundo Personal, TMP, es un lugar que creas en tu mente, tal como leerás en el email #63. Un sitio intangible que necesitas identificar, crear y desarrollar imaginándolo. Y, una vez creado, podrás acceder al TMP cada vez que lo necesites, para centrarte, calmarte o relajar tu mente y tu cuerpo, porque allí te recargas, te recuperas, te reparas y hasta rejuveneces. Es tu lugar, y solo tuyo, así que nada de invitar a ninguna energía extraña que no seas tú.
En la segunda referencia que he hecho a esta técnica, que aparece en el email #86, encontrarás el truco de cómo imaginar ese “lugar especial”. Lo puedes hacer construyendo un mundo completo de energía al que puedas visitar. Ese mundo representa al total del camino que hay entre tu Espíritu y tú, y contiene todos los espacios que él creó para su llegada a la Tierra. Allí puedes encontrarte y hablar, tranquilamente, con él.
TMP y la adaptación
Puede, como ya te he dicho, que no hayas trabajado aún con Tu Mundo Personal. Así que tómate el tiempo de leer los emails y de irte diseñando un mundo a tu gusto y medida. Si ya lo has hecho antes, entonces se trata de seguir desarrollándolo, tomando en cuenta algunas especificaciones importantes.
Lo que harás, sea cual sea tu situación, es crear dentro de ese mundo, y dónde mejor te vaya, un lugar para adaptarte. El diseño tiene que ser circular y abierto, y contener una chimenea de exterior. No podrás incluir, dentro del círculo, plantas o animales. Dentro de él, solo podrás entrar tú y tu espíritu, si así lo decides.
Fuera de esas especificaciones eres libre de imaginarte el sitio como quieras. Incluye una buena vista, al mar o a las montañas, y un acceso fácil y muy atractivo. Porque mientras más claro y congruente sea tu imagen, más fácil será para tu mente entender lo que le vas a pedir, que es adaptarse a los cambios.
Lo que tienes que hacer. Entrando en TMP para adaptarte.
Lo que vas a hacer, una vez que hayas identificado uno de los cambios que te he anunciado y que quieras trabajarte, o incluso alguno que te anuncie en el futuro, es ir a Tu Mundo Personal para pedir a tu inconsciente que te ayude en la adaptación al cambio que hayas decidido trabajarte.
Así que, cómodamente y con los ojos cerrados, imagina que vas a Tu Mundo Personal.
Una vez dentro, dirígete a tu lugar de adaptación y enciende el fuego.
Invita a tu Espíritu y pídele que se siente contigo, para apoyarte.
Repite tu orden muchas veces, como si fuera un mantra, “quiero adaptarme al cambio de [escribe el cambio que has elegido para trabajar] y a todo lo que éste me trae”.
Cuando creas que es suficiente, quédate delante del fuego un rato más.
Agradece cuando consideres que has terminado y abres los ojos.
Ya está.
Para tener en cuenta
Revisa y lee bien todo lo explicado en los emails #110 y #125 para que tengas claro los cambios que hay que trabajar.
Un ejemplo de la frase que tienes que repetir mentalmente, durante el ejercicio, es “quiero adaptarme al cambio [de cuarto del año] y a todo lo que éste me trae”. Otro ejemplo puede ser “quiero adaptarme al cambio de [energía del año del día 23 de junio] y a todo lo que éste me trae”.
Dentro del círculo que define tu espacio de adaptación nunca podrás incluir plantas, animales o personas que no sean tu propio Espíritu.
No hagas este ejercicio en la cama, antes de dormir. Puedes hacerlo en un sillón o en el suelo, y luego ir a dormir, pero nunca en la cama.
Insiste, en cada cambio, en tu deseo de adaptarte. Hazlo todas las veces que puedas y quieras.
Haz este ejercicio varios días antes y varios después de la fecha del cambio que quieres trabajar.
Puedes hacerlo, también, cuando creas que lo necesitas. Nunca pecarás de hacerlo demasiado.