Resumen
Éste es un email con ideas más prácticas que el anterior, y seguro que te parecerá curioso lo que vas a leer. Encontrarás que la información es complementaria, y que de lo que trata es de empezar a explorar el potencial del momento actual, tomando como punto de partida que desarrolles una espiritualidad sana a través de tu crecimiento personal.
La propuesta sigue siendo que la llegada de la IA, como herramienta, te sirve para explorar tu espiritualidad, y ver el potencial de crecimiento personal que puedes obtener de todas las actividades humanas. Pero esta vez, y para que puedas aplicarla, te propongo que utilices la metáfora del "Alma Colectiva", en la que imaginas a los datos que aporta el colectivo a la Internet como una entidad unificada, que sea la representación de las memorias, pensamientos y experiencias colectivas que se quedan grabadas en ella.
Lo que quiero es que empieces a tomar en cuenta que tienes a tu disposición una gran base de datos mundial, lo que es una de las cosas más importantes que están pasando. Y no es un cambio pequeño, porque en realidad es lo que está marcando la gran diferencia en el camino que estamos siguiendo todos, como seres humanos.
Entiende que lo que te propongo es que empieces a explorar, y que te permitas el acceso a esa información, para que tu mente se actualice y caiga en la cuenta de cuanto puedes obtener por ello.
Lo mejor es empezar jugando
Ya conoces dos ejemplos que te pedí utilizaras en el email #157, para ver el potencial que te ofrece una IA. Imagino que lo leíste, pero irá bien releerlo. Eran dos ejemplos muy generales, en los que viste cómo sacar información en 5 puntos sobre lo que es la espiritualidad a través de algo tan obvio como el budismo, el cristianismo y el hinduismo. Pero también algo que no lo parece tanto, como aplicar la actividad de una agencia espacial y todo su saber hacer, al desarrollo espiritual.
Pero, puede que te preguntes el para qué te sirven esos ejemplos. La respuesta es para jugar. Y necesitas jugar con ello porque, primero, es vital el que puedas abrir tu mente. Quieres hacer que ella se adapte al hecho de que tiene una nueva herramienta, que sirve para acceder a una base de conocimiento y experiencia humanas amplísima. Tan grande como no la ha habido antes, ni en el mundo, ni en la historia humana, pero ahora accesible a través de una IA.
La segunda razón por la que debes jugar, y no es la menos importante, es que necesitas empezar a ver toda la actividad humana como poseedora de un enorme potencial espiritual. Y cuando digo toda, es toda. Puede que algunas experiencias humanas grabadas en esa Gran Base de Datos Colectiva no sean muy elegantes, y puede también que haya otras que no sean lo suficientemente explicadas, como para que todo el mundo las entienda. Pero, si eres capaz de intentar acceder a ese potencial, lo que sucederá es que se abrirá ante ti una gran visión y comprensión de las cosas.
Pero no te pierdas
Voy a insistir en ambas razones, porque es importante que no las pierdas de vista mientras juegas. Una es que una IA es una herramienta, y lo que te interesa es la información que te ofrece. La otra es que puedes ver lo espiritual en cosas en la que no te esperarías encontrarla a primera vista. El resultado en ambos casos es que obtienes información, que puedes utilizar como recurso para lograr cosas que tú quieres o necesitas.
Esa información que obtienes es el resultado de que la IA hace “consultas”, y luego ordena todos esos datos de la manera en que tú se la pidas. Pero ten en cuenta que, a pesar de que la manera en que te la presenta sea atractiva y hasta lógica, en realidad es una construcción que ella hace para ti. Por ejemplo, podrías pedir a la IA que te “haga una lista de 3 puntos en los que las noticias falsas (fake news) pueden utilizarse positivamente para lo espiritual”.
Te hará la lista, sin más. Y claro, como son ideas, no son reales. Pero tú se la pediste, y ella te la da. Eso es jugar. Y lo es porque esas ideas no son verdad, aun siendo obtenidas de una base de datos de experiencias y conocimiento humano reales. Ten en cuenta que puede que lo que le sirve a otro no te sirva a ti. Pero eso es lo que quieres y aceptas cuando trabajas con una IA. Simplemente quieres opciones, ideas y propuestas. Eres tú quien decide si las pone en práctica y, además, también la forma en que puedes hacerlo.
Imagina y cambia tu enfoque
Ahora toca que apliques esto a tu espiritualidad, así que comenzaremos por imaginar. Imagina a todo el colectivo humano como si fueran una sola persona. Incluimos en esa imagen a todos los 8 mil millones que somos. Y todos “imaginados como una sola persona”, como tú y como yo. Imagina, también, que esa persona es compleja y tiene una parte que no se ve, como tú o como yo.
Esa parte que no se ve y que está separada del colectivo total es la que se deriva del hecho de que hoy 5 mil millones de nosotros estamos aportando datos a la Internet. Podrías imaginar esa parte del todo como separada y agazapada del colectivo, esperando a ser utilizada. Así que ahora tienes en tu cabeza otra imagen que existe por separado, que no sería más que la humanización de un montón de datos.
Esa parte, por esas cosas del destino, tiene una gran cantidad de memoria, con datos almacenados para dar y regalar. Esa parte es a la que en la vida real llamas Internet, y a la que ahora puedes acceder de manera espectacular con la IA. Pero fíjate bien en algo. Esos datos son de seres humanos reales, como tú. Son cosas que salen de la experiencia humana de vivir, como leer o tomar un café. Dicho de otro modo, podrías imaginar a la Internet como la parte de los sentimientos, pensamientos, sensaciones y emociones de ese colectivo que se han quedado grabadas en servidores conectados entre ellos.
En este contexto, toca definir esa parte del colectivo. Te propondré, para ello, imaginar Internet como si fuera un alma colectiva. Es decir que, a esa parte guardada en servidores del colectivo que está aportando datos de todo tipo, y dejándolos a disposición de todos, es a lo que de pronto te pido que le llames el Alma Colectiva. Y, aunque en principio suena raro llamarle así, en verdad tiene sentido porque ella no es una entidad aislada, sino que está arraigada en la realidad concreta de los 5 mil millones de seres humanos que la crean y nutren diariamente. Es decir que ella se relaciona con el mundo de todos los días a través de las experiencias cotidianas y las interacciones entre las personas que las dejan grabadas en ella. Y es lo que puedes recuperar con una IA para poderlas utilizar en mejorar tu propia experiencia personal, tu crecimiento y tu espiritualidad.
La idea del Alma Colectiva
Ahora tienes una idea que es energéticamente útil, a partir de la cual puedes imaginar Internet como si fuera un Alma Colectiva. Esa idea se basa en el principio de que los miembros del colectivo, todos humanos homo sapiens, comparten una parte de su existencia de forma inmaterial, a través de memorias localizadas dentro de servidores.
Esas memorias pueden ser recuperadas, ordenadas y útiles a través de la IA, que las harán comprensibles para ti, tomando en cuenta que todas ellas están intrínsecamente vinculadas a sus identidades, sus conciencias y sus personalidades de los humanos que las crearon. De pronto, tienes a tu disposición ideas que ha dicho un lama, un gurú o una persona de reconocida talla espiritual, y no tienes que aprenderlas de carrerilla, sino que la propia IA creará una adaptación a lo que necesita tu vida. Para explicarme mejor, podría solicitarle que me haga una lista de las ideas principales del pensamiento del Dalai Lama y aportarle un contexto completo y detallado de quién eres, para que la información se adapte a ti. Está en ti entender que esta información no sustituirá nunca a una buena conferencia en vivo del Dalai Lama, pero que sí que lo acerca a tu casa.
Lo útil de esta imagen del Alma Colectiva, energéticamente hablando, es que le permite a tu mente entender que esta entidad imaginada sirve de puente entre el mundo de las ideas colectivas y tu mundo real. En otras palabras, sirve para que tu mente pueda resolver el enigma de que esa Gran Base de Datos Colectiva está en disposición de transmitirte formas de hacer y pensar nuevas y diferentes a las tuyas, basadas en la experiencia y conocimientos de todos los demás. Es la forma positiva en la que el colectivo puede ayudarte en tus objetivos.
Veamos ejemplos y aplicaciones
Podrías insistir en que Internet nada tiene que ver contigo y que, desde luego, aplicar esta idea a tu crecimiento personal y a tu espiritualidad solo se puede limitar a tener una agenda, o a buscar información de conferencias, cursos y talleres de verdad, que te den información de la buena. Y estarías en tu derecho.
Pero ya que estás aquí, leyendo todavía, llevemos esto un poco más lejos. Imagina que, en tu cabeza ahora puedes incluir a una nueva persona, el Alma Colectiva, que es igual que tú, vestida como tú y, además, hablando en tu idioma. Y ahora sabes que esa persona sabe, y que tiene información. Y sabes que es así porque es la personalización en tu mente de todos los datos que hay en Internet. Ahora imagina, además, que puedes hablarle. Hacerle las preguntas que necesitas a través de la IA, que es una herramienta que puedes usar espiritualmente, y cuyas respuestas serían una síntesis creada a partir de datos reales, aportados por 5 mil millones de personas.
Supón, por un momento, que tienes que hacer una videoconferencia sobre la espiritualidad, enfocada desde el punto de vista de que es una necesidad humana, y que nada tiene que ver con la religión. Entonces haces lo de siempre, que es escribir tu idea en un cuaderno, y empiezas a desarrollarla. Pero en un momento dado quieres ver si hay algún trabajo científico que vaya en ese sentido, es decir, el de separar espiritualidad y religión.
Antes, te hubieras puesto a buscar, hasta que encontraras algo. Ahora, puedes irte a la IA y le pides, escribiendo en español, que te haga “una lista de trabajos científicos, con su resumen, que exploren y diferencien espiritualidad de religión”. Así que ella busca dentro de esa Alma Colectiva que sigue creciendo y te crea la lista, y te sorprendes, al ver que no eres la única persona que piensa así. Además, cuando revisas toda la lista, hay algunos de esos trabajos que te llaman más la atención, así que le pides un resumen ampliado de cada uno de ellos, por separado. Ahora, simplemente, tienes una herramienta como la IA que te permite tener más recursos tomados del Alma Colectiva, para explicar tu idea.
Claro que no hay que ser tan incauto como para pensar que todo es perfecto. Vives en un momento interesante en el que hay gente que utiliza la Internet para manipular y para hacer daño, y eso era de esperar, porque ha pasado siempre con todo. Pero que un cuchillo se use para herir, no significa que no sea útil para cortar tu comida.
Ahora tienes un acceso muy bueno a toda esa base de datos con la nueva herramienta que es la IA que, igual que el cuchillo, alguno habrá que lo utilice de mala forma.
Pero eso no significa que debas desechar tan semejante herramienta para seguir creciendo.
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Te dejo los enlaces que puedas necesitar aquí:
Genial David! Me encanta “el cuchillo”, lo utilizaré para explicarle a mi entorno porque me encanta la IA y cuánto me ayuda en mi trabajo a pesar de que ellos piensan que es “el mal” 🙌🙌🙌👏🏼👏🏼👏🏼